Crea múltiples automatizaciones que hacen el trabajo duro por tí, eliminando el esfuerzo innecesario que te impide centrarte en la parte humana de tu negocio.
Crea múltiples automatizaciones que hacen el trabajo duro por tí, eliminando el esfuerzo innecesario que te impide centrarte en la parte humana de tu negocio.
El software de automatización está pensado para eliminar las tareas repetitivas, o que pueden ser fácilmente realizadas por una máquina.
Gracias a una de estas herramientas, puedes trabajar mucho más rápido al reducir la cantidad de acciones que debes realizar para completar un objetivo empresarial.
Por ejemplo, en un proceso de ventas, es posible etiquetar automáticamente a tus prospectos cuando se cumplan ciertas condiciones. O al alcanzar una determinada etapa en un proyecto, generar y asignar las tareas necesarias para los miembros del equipo.
La automatización de procesos es esencial para aumentar la productividad de una empresa. Las empresas que utilizan este tipo de software consiguen mejores resultados a un menor coste-- es decir, son más productivas en general.
En Vendomia, puedes crear múltiples automatizaciones para diferentes partes de tu negocio.
Una automatización consiste en un disparador, que desencadena una secuencia de acciones y condiciones. El disparador puede ser una acción cualquiera de tu elección, como por ejemplo el acto de modificar una oportunidad de venta. La secuencia de acciones que se lanza a continuación realiza cada uno de los pasos necesarios para completar la automatización.
Por ejemplo, es posible crear una automatización donde al cambiar una venta de fase, se genere una tarea con datos provenientes de la venta.
Cada vez que se dispara una automatización, se crea un flujo de trabajo.
Los flujos de trabajo son la secuencia completa de pasos que se deben realizar para completar el proceso automatizado. Aunque lo habitual es que un flujo de trabajo se complete sn problemas, puede haber casos en donde no se cumplen los requisitos necesarios.
Por ejemplo, puedes indicar una condición que debe cumplirse para poder continuar con el flujo de trabajo.